Recientemente estuve leyendo como las personas que corren maratones se preparan durante mucho tiempo para que un día puedan resistir correr los 42 kilómetros y 195 metros que es la distancia oficial para un maratón.
Ellos no comienzan corriendo los 42 kilómetros desde la primera vez, al contrario de lo que se pueda pensar un maratonista en sus inicios comienza corriendo entre 1 a 2 kilómetros diarios y cada día va aumentando la distancia, alcanzando así un nuevo nivel en su capacidad de recorrer más kilómetros diariamente.
Esto me hizo pensar cuando Pablo dijo en 2 Timoteo 4:7 “He peleado la buena batalla, he terminado LA CARRERA…” efectivamente se refería a que la vida cristiana es como una carrera, pero no es una carrera de velocidad, es una carrera de resistencia, al igual que lo es un maratón.
Todos los días debes ejercitar tu fe, tu nivel de conocimiento de Dios, debes ejercitar tu relación con el Espíritu Santo, para que diariamente vayas alcanzando un nuevo nivel en tu relación íntima con Dios, por ejemplo si antes solo podías orar 5 minutos, ve agregando a tu oración 1 minuto más cada día, si antes solo podías leer 1 capítulo de la Biblia, ve agregando un capitulo más cada día, si antes creías que Dios podía abrirte las puertas para proveerte $100, porqué no pensar que Dios también puede abrirte las puertas para proveerte $1,000.
Otra clave importante para poder alcanzar cada día un nuevo nivel en tu relación con Dios, es cuidar aquello con lo cual estas alimentando tu mente y por ende tus pensamientos, los maratonistas cuidan la calorías que ingieren en la comida, los carbohidratos, las proteínas y las grasas, es importante para ellos mantener una alimentación que vaya de acuerdo al ejercicio que están realizando para que su cuerpo responda bien el día de la competencia, así que alimenta tus pensamientos con las promesas que Dios dejó en la Biblia para ti, con la palabra que recibes en la iglesia por medio del pastor, por la palabra que recibes cada viernes en el grupo o célula, lee libros que te edifiquen espiritualmente y así tu espíritu estará preparado para soportar cualquier circunstancia que venga a tu vida.
Dios quiere darte un nuevo nivel de unción, un nuevo nivel de fe, un nuevo nivel de su presencia, pero tienes que estar preparado para subir ese peldaño con paso firme porque seguramente vendrán problemas, circunstancias adversas que intentaran hacer que bajes de nivel y que cada día creas menos en las promesas de Dios, pero quiero recordarte la ultima frase que dice Pablo en 2 Timoteo 4:7 “… he guardado la fe”.
Esta es una frase que siempre menciono y es que “DEBES SER FELIZ Y AGRADECIDO CON LO QUE TIENES HOY, PERO CREYENDO QUE VAS A ESTAR MEJOR MAÑANA” de eso se trata estar anhelando siempre el siguiente nivel.
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