jueves, 26 de mayo de 2011

Alcanzando un nuevo nivel de unción


Hace poco estuve meditando sobre la manera en que los reyes y sacerdotes eran ungidos o escogidos según el Antiguo Testamento. Cuando Dios elegía rey para el pueblo de Israel enviaba a un profeta para ungirlo con aceite, también sucedía lo mismo cuando Dios escogía al Sumo Sacerdote para que sirviera en el templo.

Esto significaba que era el ELEGIDO por Dios para ocupar esta posición, significaba que Dios había visto cualidades y actitudes idóneas para poder desempeñar las tareas que El le daría a realizar, en otras palabras Dios depositaba en esa persona toda su confianza. ¿Sabes lo que significa el hecho que Dios deposite su confianza en una persona para entregarle algo tan valioso como es Su unción?

Ahora que ya no estamos bajo la ley sino en la gracia, tenemos la bendición de ser ungidos por Dios por medio de su Santo Espíritu para poder ser de bendición para otras personas. La unción es un regalo que podemos obtener con tan solo tener una vida de santidad y pedírselo al Espíritu Santo.

Según el diccionario unción significa: Gracia o don especial que mueve al alma a la realización de una obra.

Debemos anhelar y pedir la unción del Espíritu Santo, pero también debemos entender que no es suficiente solo con tener la unción, debemos poseer en nuestro corazón el deseo de siempre alcanzar un nuevo nivel de la unción del Espíritu Santo.

Un ejemplo de querer alcanzar un nuevo nivel de unción fue Eliseo, podemos leer en 2 Reyes 2:9 que Elías  le preguntó si quería algo que él hiciera o le diera y Eliseo le pide una doble porción de unción, Eliseo sabía que sin la unción del Espíritu Santo no podría desempeñar las tareas para lo cual había sido llamado, pero también sabía que podía tener otro nivel de unción y Eliseo pidió mas, pidió el doble.

Es importante que sepas que debes cuidar ese regalo maravilloso que es la unción del Espíritu Santo, también debes tener en cuenta que la unción del Espíritu Santo es el poder mismo de Dios que se te otorga para que puedas servir a Dios de mejor manera (Lucas 4:18-19), para que puedas salir victorioso antes los ataques del enemigo, para que tus fuerzas físicas y espirituales sean renovadas (Salmos 92:10), para que puedas bendecir a otras personas rompiendo los yugos que los atan (Isaías 10:24).

En La Biblia podemos leer cómo la unción del Espíritu Santo transformó por completo la vida del Apóstol Pedro. Antes del día de pentecostés, Pedro agredió a uno de los soldados que iban a arrestar a Jesús, luego negó a Jesús tres veces.  Pero después del día de pentecostés vemos a un Pedro totalmente diferente dando su primera prédica donde se convirtieron 3,000 personas y  sanando al paralítico en la puerta del templo.

De algo puedes estar seguro, cuando tengas la unción del Espíritu Santo en ti, tu vida no volverá a ser la misma y si cada día anhelas más de ella y deseas fervientemente alcanzar un nuevo nivel de unción, seguramente serás una persona que siempre estará rodeada de cosas sobrenaturales y extraordinarias de parte de Dios.

Hoy Dios está esperando que le digas que es lo que deseas que El te dé, yo espero que tu imites la actitud de Eliseo y pidas una doble porción de su Espíritu, solo debes tener la humildad de arrodillarte y recoger el manto e inclinar tu cabeza para que el aceite fresco de su unción inunde todo tu ser.

Salmos 133:2 Es como el buen óleo sobre la cabeza,
El cual desciende sobre la barba,
La barba de Aarón,
y baja hasta el borde de sus vestiduras;

viernes, 13 de mayo de 2011

Alcanzando un nuevo nivel de fe


Creo que muchos de nosotros hemos orado a Dios pidiendo que nos de fe para poder creer por cosas mayores de las ya que hemos alcanzado.

Los discípulos también le pidieron lo mismo a Jesús en una ocasión y le dijeron:  “Señor auméntanos la Fe” (Lucas 17:5). Los discípulos sabían y entendían que hay varios niveles de fe y querían tener un nivel más alto para seguir creyendo en Jesús y no dudar.

En ocasiones anteriores he comentado que la mejor arma que el diablo utiliza contra los hijos de Dios se llama "desánimo", y esta arma la utiliza precisamente para sembrar duda en nuestra mente y corazón y así hacer que nuestra fe, lejos de crecer vaya menguando.

Muchas veces nos hemos preguntado ¿Cómo puedo crecer en mi nivel de FE? Realmente deberíamos hacernos dos preguntas, y la primera de ellas es ¿Cómo puedo mantener mi nivel de fe actual? Y la segunda sería ¿Cómo puedo alcanzar el siguiente nivel de fe en mi vida?

La respuesta a la primer pregunta la encontramos en Romanos 10:17 dice: “Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios” la única manera de mantener la fe que ya tenemos y no permitir que el enemigo nos haga dudar es oír la palabra de Dios constantemente, leyendo la Biblia, escuchando las predicas en la iglesia para que puedas responder a las mentiras del enemigo de acuerdo a la palabra de Dios de la misma manera que Jesús le respondió cuando fue tentado en el desierto.

Para la segunda pregunta podemos ver en Romanos 4:18-21 como Abraham pudo fortalecer su fe y hacer que creciera cada día mas. En estos versículos podemos ver las siguientes claves que podemos aplicar en nuestra vida para subir nuestro nivel de fe.

  • Creer en esperanza contra esperanza: esto es creer a la esperanza que tienes en las promesas de Dios y no a la esperanza que el mundo y las personas puedan darte.

  • No se debilitó su fe en medio de las circunstancias adversas: de acuerdo a la lógica humana era imposible que Abraham y Sara pudieran tener hijos, Abraham era un anciano y Sara había sido estéril toda la vida, pero aún con todos los pronósticos en contra, la fe de Abraham lejos de debilitarse, se fortaleció y aumentó.

  • Nunca dudó:  En Santiago 1:6 dice: “ Pero pida con fe, no dudando nada…”, el problema no es que derepente llegue una duda a tu mente, sino que hagas que la duda crezca dentro de ti  hasta el punto que desplace y ahogue la fe que tienes en tu corazón, Abraham no dudó sino fortaleció su fe dando Gloria a Dios. Darle a Dios la honra y la gloria en medio de las circunstancias seguramente hará que tu fe alcance un nuevo nivel.

  • Estar convencido:  Esto es estar plenamente seguro de algo, de tal manera que no se pueda negar o dudar.  Abraham estuvo plenamente seguro que Dios era todopoderoso para hacer lo que le había prometido, aún cuando posiblemente los amigos, las circunstancias, el razonamiento y la lógica humana le decían que no era posible tener una descendencia. Cada vez que llega a tu vida la duda y tu permaneces convencido de las promesas de Dios para tu vida, seguramente estarás alcanzando un nuevo nivel en tu manera de creerle a Dios.

La Biblia dice que sin fe es imposible agradar a Dios, y si yo quiero ser agradable delante de Dios debo tener fe y cada vez que mi fe es incrementada y alcanzo un nuevo nivel, también estoy alcanzando un nuevo nivel en mi manera de agradar a  Dios.

Hoy te invito a mantener el nivel de fe que ya tienes y así te mantengas agradable a Dios, pero también quiero retarte a que alcances un nuevo nivel de fe, porque estoy seguro que cuanto mas agradable a Dios seas por medio de tu fe, pasarán cosas extraordinarias e impresionantes en tu vida.

¿Aceptas el reto?